Anuncio de la casa: El praliné más largo del mundo
Hay un anuncio de televisión que me fascina: En un vagón de metro abarrotado, todos los pasajeros están ocupados con sus smartphones: nadie tiene contacto visual con su vecino.
Sólo dos jóvenes, una mujer y un hombre, se miran tímidamente: obviamente no tienen smartphone o no hay razón para que lo utilicen ni siquiera mientras conducen.
Caminan el uno hacia el otro cuando, de repente, el hombre se agarra el pecho y finge que su smartphone está vibrando. La mujer mira tímidamente a un lado.
De su bolsillo del pecho, el hombre saca una tableta de chocolate Duplo alargada, insinúa brevemente una conversación telefónica y luego entrega la tableta a la mujer con las palabras "Para ti". Final feliz.
No sé si este anuncio representa la vida real, y hasta qué punto la intensa preocupación por los smartphones impide el contacto interpersonal es una cuestión que otros deben investigar.
Veo que la atención y la fascinación por la tecnología pueden cegarte ante las cosas bellas e importantes de la vida. Al final, cada uno tiene que encontrar su propio camino a través de Facebook, Instagram, Snapchat, Twitter en smartphones, tabletas y portátiles.
También es comprensible y tolerable cierta fascinación por la tecnología. Pero las manipulaciones de imágenes absolutamente sin sentido de una aplicación de Snapchat en un smartphone son algoritmos muy sofisticados que harían honor a cualquier matemático o informático. Así que siempre es necesario considerar varios lados.
SAP también está más fascinada que nunca por la tecnología, las matemáticas y los algoritmos. Empezó con Hana "en tiempo real". El CIO de SAP, Thomas Saueressig, hizo una demostración en gran medida sin sentido con gafas virtuales y realidad aumentada en los DSAG Technology Days de este año.
Mientras miraba desde el escenario al público, se mostró un avatar que realizaba ciertas funciones de oficina y transmitía mensajes. La demostración requería mucho esfuerzo técnico. El valor añadido no me quedó claro.
La idea de que en el futuro los usuarios de SAP hagan su trabajo con gafas de realidad aumentada es aterradora. Solo nos queda esperar que un remanente de usuarios y socios sin gafas siga teniendo ojo para la vida real, como la pareja del anuncio de televisión antes mencionado.
El peligro es que la tecnología se convierta en un fin en sí misma. La base de datos de computación en memoria calcula muy rápido, pero ¿con qué fin? El Centro Federal de Computación de Austria (BRZ) está investigando qué valor añadido puede aportar Hana además de la ventaja de la velocidad.
Si con Hana todo está listo treinta minutos antes, ¿qué se supone que van a hacer los funcionarios de BRZ con el tiempo "ganado"? Es de temer que la tecnología fascine y se descuiden temas como la administración y organización empresarial, con los que SAP se ha hecho grande y es líder del mercado mundial.
Con el software empresarial estándar, SAP puede reivindicar una propuesta de venta única; con tecnologías como la realidad aumentada, el aprendizaje automático, la computación en la nube o Hana, no es más que una entre muchas.