Uniserv: Comprobación de plausibilidad para nuevos formatos de datos bancarios

En febrero de 2014, el IBAN, el número internacional de cuenta bancaria, sustituirá al código bancario y al número de cuenta y garantizará formatos de datos uniformes en toda Europa. A pesar de la urgencia del cambio a la SEPA, muchas empresas lamentablemente no reconocen la necesidad de actuar.

El estudio actual de ibi research, "Implantación de la SEPA en Alemania", muestra también que la SEPA aún no ha calado realmente en la conciencia de un tercio de las organizaciones encuestadas.

Y sólo otro tercio de las empresas utiliza ya las transferencias SEPA de forma esporádica. El paso al espacio europeo de pagos no sólo conlleva cambios para los departamentos financieros, sino que afecta a casi todos los departamentos.

Con bank.International, el usuario puede verificar de forma cómoda y fiable los datos bancarios de los clientes. El software comprueba si el IBAN es sintácticamente correcto, cumple todas las especificaciones de la estructura de un IBAN y puede asignarse claramente a un banco.

La verosimilitud del IBAN se comprueba asignando un Código Internacional de Identificación Bancaria (BIC) o cotejando el IBAN y el BIC entre sí.

"Lo inteligente de bank.International es que la solución puede integrarse perfectamente en las aplicaciones pertinentes, cubre diferentes escenarios de implantación de forma muy flexible mediante tecnologías en la nube y, por último, pero no por ello menos importante, minimiza los riesgos para las empresas."

Michael Luderer, Director General de Severn Consultancy, describe las ventajas desde el punto de vista del consultor.

Para obtener resultados de la máxima calidad, bank.International utiliza los datos de referencia de SWIFT, la Sociedad para las Telecomunicaciones Financieras Interbancarias Mundiales. Los datos de conexión bancaria y los números de tarjeta de crédito incorrectos ya se reconocen durante la introducción de los datos, y los errores tipográficos se corrigen de forma fiable. Esto minimiza el riesgo de una transacción fallida.