Escuchar a los clientes de SAP es importante, pero no sustituye al trabajo duro
Antes de que SAP anunciara su adquisición de Emarsys, anunció algo más: su plan para escindir Qualtrics, lo que significa que la empresa de gestión de experiencias saldrá a bolsa. Lo cual, seamos sinceros, no es más que un intento de SAP de hacer de la necesidad virtud. La empresa de ERP hizo una apuesta arriesgada al adquirir Qualtrics por 8.000 millones de dólares, cuando las estimaciones iniciales situaban su valor de mercado entre 4.000 y 5.000 millones de dólares, y no le salió bien. Hay que ser bueno para admitirlo, y respeto la decisión del CEO de SAP, Christian Klein. En parte, porque está claro que no fue idea de los clientes. La decisión de Klein es un raro caso en el que él y su equipo directivo no dependieron de los clientes para señalar los puntos débiles, pero aún queda mucho por hacer en ese sentido.