Inteligencia de procesos empresariales


La optimización de procesos allana el camino de la RPA a la hiperautomatización
Signavio, proveedor de soluciones de transformación de procesos empresariales, muestra la importancia de una solución de inteligencia de procesos empresariales para la mejora de procesos. Cualquier automatización, ya sea RPA (automatización robótica de procesos) o hiperautomatización, no se dirige en última instancia a tareas individuales, sino a procesos completos. Esto significa que el proceso debe estar en el centro de toda iniciativa de automatización. Las soluciones de automatización siempre despliegan sus mayores ventajas sólo en combinación con mejoras de los procesos. Son un requisito previo básico, porque la automatización pura de procesos subóptimos difícilmente puede lograr el resultado deseado.
Un proceso ineficiente sigue siéndolo aunque se automatice. Si los procesos son defectuosos, en el peor de los casos estos errores se implementan aún más rápido. Por lo tanto, la clave del éxito de la RPA o la hiperautomatización es: primero optimizar y luego automatizar. Es crucial automatizar sobre la base correcta, es decir, sobre la base de procesos óptimos. Los procesos fluidos son el requisito previo para lograr los éxitos previstos, el valor añadido deseado y sin costes adicionales.
Para optimizar los procesos se necesita una solución de Business Process Intelligence (BPI). Una solución BPI permite analizar, mejorar y supervisar los procesos. Con el software RPA se pueden automatizar procesos manuales o estandarizados sencillos. Se trata principalmente de actividades repetitivas basadas en reglas. Las variantes más comunes son los robots RPA asistidos y desatendidos. El RPA asistido se ejecuta en el ordenador de sobremesa. El bot actúa como asistente de software para el usuario humano e interactúa con una aplicación de escritorio. Con la RPA desatendida, los procesos pueden automatizarse de principio a fin utilizando bots instalados en clústeres de servidores. En este caso, los bots de software autónomos trabajan de forma independiente en el núcleo de un sistema de información.
La hiperautomatización va mucho más allá de las posibilidades de una aplicación RPA pura, en la dirección de la automatización inteligente de procesos. Es precisamente esa automatización inteligente de procesos la que requiere una integración perfecta con una solución BPI. Al fin y al cabo, la hiperautomatización siempre implica una transformación integral de los procesos empresariales. Y para ello, los componentes clásicos de BPI, como el análisis, el diseño y el modelado, la simulación, la gestión de cambios o la supervisión, son indispensables.