No siempre tiene que ser Ariba
Los usuarios de SAP Supplier Relationship Management (SRM) y Supplier Lifecycle Management (SLC) están bajo presión. El fin del mantenimiento de Business Suite 7 anunciado para 2025 obliga a pensar en nuevas opciones para las compras basadas en SAP.
La propia SAP se centra en la red Ariba y la suite ERP en tiempo real S/4 Hana. Sin embargo, como solución de nube pública, Ariba no es una opción para todas las organizaciones de compras. Una de las razones es la preocupación por la protección de datos, otra es que solo se pueden asignar procesos de compra estandarizados con muy poca necesidad de personalización.
Las características específicas del sector y regionales, como el estándar GAEB para servicios de construcción, suelen quedarse en el camino en soluciones de nube pública como Ariba.
¿S/4 Hana entonces?
Hay mucho que decir al respecto. Por ejemplo, la nueva Business Suite contiene las mismas funciones de aprovisionamiento que antes estaban disponibles como SAP Materials Management (SAP MM). Dado que S/4 se basa en la plataforma in-memory Hana, los usuarios se benefician de importantes aumentos de rendimiento, así como de mejores posibilidades para la elaboración de informes ad-hoc, análisis y simulaciones.
Gracias a la intuitiva tecnología de interfaz SAP Fiori, pueden acceder más fácil y rápidamente a todas las funciones de compra que necesitan. Y pueden hacerlo desde cualquier dispositivo, en cualquier lugar y en cualquier momento.
Para los usuarios de las soluciones de compras clásicas de SAP, la estrategia S/4 Hana tiene consecuencias diferentes: Mientras que SAP SLC se integrará directamente en S/4 Hana y estará disponible de serie para todos los clientes, el ampliamente utilizado y probado SAP SRM se eliminará gradualmente a más tardar en 2025.
Mientras el tiempo se agota, los usuarios de SRM se enfrentan actualmente a la cuestión de si deben seguir invirtiendo en su sistema de compras para aplicar las innovaciones necesarias.
Además de la mejora de la eficiencia, son sobre todo los requisitos legales los que impulsan actualmente la transformación digital de las compras. Un ejemplo son las nuevas directivas de contratación pública de la UE.
Alineación con la hoja de ruta
En principio, es aconsejable alinear una decisión de inversión en compras basadas en SAP con la hoja de ruta general de S/4 Hana de una empresa. ¿No hay ningún plan para cambiar a S/4 Hana en los próximos tres años? Entonces merece la pena invertir en las soluciones SRM y SLC existentes.
Como estas soluciones de compra estarán en mantenimiento al menos hasta finales de 2025, los clientes recibirán periódicamente paquetes de mejoras y actualizaciones de seguridad.
Sin embargo, si el cambio a S/4 se va a producir en los próximos tres años, es aconsejable esperar hasta entonces con ajustes importantes del sistema. Las organizaciones de compras pueden cubrir las necesidades actuales con soluciones especiales en la nube.
Otra alternativa la ofrecen las soluciones de transición integradas, en las que numerosas funciones útiles de aprovisionamiento se integran directamente en la infraestructura SAP existente.
Esto tiene numerosas ventajas para los usuarios, especialmente de carácter comercial. Dado que SAP SRM pasa a ser completamente prescindible, puede ser un proyecto de coste neutro.
El ahorro en el hardware omitido compensa las inversiones en la nueva solución. Además, el coste total de propiedad (TCO) se reduce porque el entorno de sistemas anteriormente complejo de ERP, SRM, catálogo y gestión de contenidos se reduce a un único sistema.
La integración directa en el entorno ERP aumenta la seguridad de los datos. También garantiza una base de datos coherente y facilita la migración posterior a S/4 Hana.
Con una solución de transición integrada, las empresas pueden adaptar sus compras a la era digital sin tener que cambiar a corto plazo a la nube de Ariba o a S/4.
Según una reciente encuesta de inversión de DSAG, sólo una pequeña proporción tiene previsto cambiar a S/4 en los próximos tres años. Dos tercios de las empresas encuestadas afirmaron que querían seguir con el ERP tradicional durante este periodo o aún estaban indecisas.