La tendencia es hacia la externalización
El éxito de las implantaciones de SAP en la era digital depende en gran medida de la eficacia y solidez de los procesos de prueba de garantía empresarial de SAP. Dado que los procesos empresariales ya no empiezan y terminan en S/4 Hana, se ejecutan en todas las plataformas y aplicaciones. Al mismo tiempo, el desarrollo dinámico de los procesos digitales exige actualizaciones más frecuentes. Sin embargo, cada una de estas actualizaciones también requiere pruebas exhaustivas y complejas. Esto plantea grandes retos a los departamentos de TI de las empresas. Según el informe SAP Business Assurance Report, elaborado por Tricentis en colaboración con Capgemini y Sogeti, los departamentos internos de TI siguen siendo actualmente los responsables de garantizar la calidad de las aplicaciones SAP en el 45,6% de las empresas. En el 27,8 por ciento de los encuestados se han creado equipos de pruebas especiales para las pruebas SAP de extremo a extremo. Y en el 21,3 por ciento de las empresas, la responsabilidad de las pruebas recae en el equipo de gestión de calidad del proyecto respectivo. Sin embargo, la abundancia y la alta complejidad de las tareas de pruebas en el entorno SAP requieren amplios recursos humanos y técnicos.
Los mermados departamentos de TI suelen ser incapaces de proporcionarlos. El informe, para el que se encuestó a más de 750 personas de organizaciones con una facturación superior a los mil millones de dólares estadounidenses de diferentes sectores y un total de 17 países, registra por tanto una tendencia clara: las empresas confían cada vez más en proveedores externos especializados en pruebas de software, especialmente para pruebas complejas. Por ejemplo, el 45,1% confía actualmente en proveedores de servicios para pruebas de API/componentes y el 43,7% en proveedores de pruebas de rendimiento. En general, existe una creciente demanda de proveedores de servicios especializados en el área de SAP Business Assurance. Cabe suponer que esta tendencia se mantendrá, ya que estos proveedores cuentan con los conocimientos técnicos y funcionales necesarios. No sólo aportan las herramientas necesarias, sino sobre todo la experiencia necesaria.