Crece la concienciación - aumentan los retos

Hace poco más de un año, la Industria 4.0 era todavía una gran desconocida. Entretanto, el tema se debate animadamente en muchas empresas. Cómo puede el "viejo" mundo de las máquinas con plantas, con un ciclo de vida de 15 o 20 años, enlazarse con el mundo de los procesos empresariales y las TI como nexo de unión?

Por ejemplo, las máquinas deben equiparse con sensores y las TI deben complementarse con nuevos procesos empresariales capaces de agrupar y evaluar la nueva información.

Es importante encontrar vías y posibilidades. Bajo la palabra clave "digitalización" habrá cada vez más casos prácticos que podrán combinarse en "conceptos globales" en los próximos años.

En mi opinión, uno de los retos de la Industria 4.0 es la cuestión de la normalización. Los fabricantes y proveedores no quieren renunciar tan fácilmente a sus normas, que están aseguradas y definidas por contratos, acuerdos con proveedores, etc.

Sería fácil debatir las normas en los próximos años con el objetivo de encontrar la "super norma" uniforme. Pero será más importante acelerar el ritmo al que avanza la Industria 4.0 y ponerse rápidamente de acuerdo sobre los debates políticos previstos.

Porque otras naciones ya están entrando hoy en la carrera con una Agenda 2025. Aquí, las arquitecturas informáticas de las empresas aún no han crecido durante más tiempo y son más flexibles.

En los próximos años, es probable que muchas empresas europeas no puedan aplicar tan fácilmente el cambio a la digitalización y al mundo de la Industria 4.0.

Podría ser útil que renunciáramos a uno u otro porcentaje de nuestra búsqueda de la perfección y la precisión en favor de un mayor ritmo de innovación.

Encontrar soluciones para el tamaño de lote UNO

La Internet de los objetos abrirá nuevas oportunidades para acercarse aún más a los clientes. Esto hace que el tema del "tamaño de lote uno" sea cada vez más realista.

Sin embargo, en el ámbito del conflicto entre los modelos y procesos empresariales actuales y un producto adaptado individualmente al cliente, primero hay que encontrar soluciones viables que hagan justicia a ambas partes. Este es uno de los mayores retos asociados a la Industria 4.0.

Tirar por la borda las viejas formas de pensar

En primer lugar, las empresas deben examinar sus actuales arquitecturas de procesos y TI. Estos sistemas suelen basarse en hojas de ruta fijas para medidas de consolidación y armonización en plazos concretos de tres a cinco años.

Sin embargo, debe ser posible debatir en las empresas si no tendría sentido dar dos pasos a la vez. En concreto, esto significa tirar por la borda la vieja mentalidad de cambio de versión tras cambio de versión y dar el salto tecnológico a una nueva plataforma de Internet de las Cosas.

Este paso requiere cierto coraje empresarial. No bastará con seguir operando con patrones arraigados y abordar la cuestión únicamente a través de la optimización.

Más bien habría que redefinir en algunos casos las hojas de ruta existentes y quizá incluso replantearse una o dos decisiones informáticas de hace dos años en colaboración con el departamento solicitante.

Pero son precisamente este tipo de medidas revolucionarias las que se necesitan también en términos de arquitectura de TI para salir de la larga tradición y entrar en el nuevo mundo de TI que anuncia la Industria 4.0.

Además, es importante que muchas áreas trabajen juntas, que los organismos de investigación y las asociaciones debatan entre sí y con los demás, que las universidades arrojen luz sobre el tema desde su punto de vista y, cuando sea posible y sensato, desarrollen perfiles de competencias y perfiles laborales totalmente nuevos.

A largo plazo, la Industria 4.0 no es algo que una empresa pueda implantar de forma aislada. Solo todos juntos pueden tirar de la palanca de la Industria 4.0.