DSAG: el banco de trabajo ampliado de SAP
A pesar de la pandemia, la transformación digital continúa inexorablemente, lo que provoca una cierta falta de personal entre los clientes existentes, los socios y la propia SAP. Desde la perspectiva del departamento de RRHH de SAP, el fichaje de Steffen Pietsch, miembro de la junta directiva del DSAG, por parte de su anterior empleador, Haufe-Lexware, es un paso lógico, por no decir sensato.
Steffen Pietsch ha demostrado repetidamente sus conocimientos en numerosas conferencias de la DSAG y en su labor en la junta directiva. Profesionalmente versado y lingüísticamente hábil, Steffen Pietsch era un activo no solo para la asociación DSAG, sino para toda la comunidad.
Él mismo escribe a los miembros del GASD: "En las últimas semanas me ha surgido la opción de trasladarme a SAP SE y asumir la responsabilidad del diseño y la gestión de productos de la Business Technology Platform (BTP). Estoy convencido de la necesidad estratégica y la relevancia de la BTP y espero incorporar las necesidades de los clientes y socios de forma aún más directa en la dirección y el establecimiento de prioridades en mi futuro cargo. Este paso no es compatible con el desempeño simultáneo del cargo en la Junta Directiva del GASD, por lo que dejaré de ser director técnico."
Al parecer, las extraordinarias aptitudes de Steffen Pietsch también salieron a relucir en SAP, en Walldorf. No pudieron evitarlo y le hicieron una lucrativa oferta que incluía un coche de empresa. Si fuera un caso aislado, una oportunidad única, un acto que beneficiara a todos y no sólo a SAP, la comunidad podría hacer la vista gorda: El fin justifica los medios.
Por otra parte, el intento de infiltración y control del GASD por parte de SAP tiene una larga tradición. Lo que la comunidad ve aquí es sólo la famosa punta del iceberg. SAP no sólo tiene un buen software financiero y de control, sino que ella misma es una "maniática del control", que es lo que algunos compañeros dicen del CEO de SAP, Christian Klein. Los demás siempre tienen que ser jugadores de equipo, mientras que él mismo se permite controlar hasta la saciedad.
Naturalmente, SAP tiene muchas posibilidades de dirigir y controlar la asociación y la GmbH DSAG. La intensísima coordinación entre
Las publicaciones del GASD y el SAP podrían ser un indicio de falta de independencia. Es una zona limítrofe que con demasiada frecuencia acaba en la zona gris. Un antiguo presidente de la junta directiva del GASD lo repetía una y otra vez: primero, las conversaciones con el SAP se mantienen a puerta cerrada y, cuando hay resultados dignos de mención, se abren las puertas.
El hecho de que se necesiten mutuamente a su vez da lugar a cierta cercanía entre el GASD y el SAP, a veces incluso familiaridad y amistad. En tal mezcolanza, no es fácil para todos los implicados ver las líneas rojas. Por eso, desde hace años se pide que la importante labor de la asociación sea mucho más abierta y transparente.
Pero no sólo la junta directiva del DSAG está en contra de esta transparencia, sino también el propio SAP; al fin y al cabo, ambos organismos se benefician de cierto secretismo. Los perjudicados y los ignorantes son los miembros de a pie del GASD.