Automatización robótica de procesos: ¡no sin cultura!
El tema está en todas partes: la inteligencia artificial (IA). Se espera que todas las empresas tengan algo que mostrar en el campo de la IA, preferiblemente soluciones desde la nube.
Pero nadie revela cómo pueden los empresarios preparar a sus organizaciones para los efectos de la IA y la RPA. La inteligencia artificial y la RPA asustan a muchos empleados e inquietan mucho a los directivos. Si luego hay que ofrecer estas soluciones desde la nube, a menudo resultan abrumadoras.
Además de la implementación técnica, una estrategia exitosa de IA debe tener en cuenta aspectos tanto culturales como empresariales. Ser una organización habilitada para la IA exige un cambio fundamental en la forma de actuar, de interactuar de los empleados entre sí, de qué competencias disponen y por qué procesos y principios se rige el comportamiento.
Estos cambios necesarios penetran hasta el núcleo de la cultura empresarial. Tiene sentido abordar la transformación necesaria de forma holística.
La creación de una cultura basada en la IA requiere una organización impulsada por los datos. Al mismo tiempo, hay que capacitar a las personas para que participen en la transformación de la IA y crear un entorno integrador que permita la colaboración interdisciplinar y multidisciplinar.
También es importante encontrar un uso responsable de la IA que no aliene a los empleados. Por supuesto, esto solo es posible con un liderazgo fuerte.
El liderazgo debe impulsar el cambio abrazando los cambios necesarios para esta transformación y apoyando activamente a las personas.
El primer paso es asegurarse de que los datos de la empresa son válidos. Unos datos de alta calidad y una base de datos completa no sólo permiten un control significativo, sino que también constituyen la base de todo buen sistema de IA.
Aquí es donde SAP Intelligent Robotic Process Automation puede proporcionar ayuda. Proporcionado en la nube, pueden automatizarse tareas recurrentes como la creación de datos maestros.
La tasa de error con el uso de RPA es significativamente inferior a la del uso humano. Además, una empresa solo puede orientarse por los datos si la base de datos está disponible para todos los departamentos en alta calidad y no se mantiene en silos individuales.
A diferencia de los proyectos de TI de menor envergadura, la IA y la RPA tienen que ver sobre todo con la cultura corporativa. Fomentar una cultura habilitada para la IA significa capacitar a las personas para que formen parte de la transformación de la IA.
A su vez, el requisito previo básico para la capacitación es: dar a las personas el espacio, los recursos, la seguridad y el apoyo que necesitan cuando tratan con la inteligencia artificial.
El tercer elemento clave de una cultura basada en la IA es la promoción de su uso responsable. A medida que la IA sigue evolucionando, tiene el potencial de provocar cambios significativos en nuestras vidas y plantea cuestiones complejas y desafiantes sobre el tipo de futuro que queremos.
Las empresas deben preguntarse: ¿Cómo diseñamos, construimos y utilizamos los sistemas de IA para que tengan un impacto positivo en las personas y la sociedad? ¿Cómo podemos garantizar que los sistemas de IA traten a todos con equidad? ¿Cuál es la mejor manera de preparar a los empleados para la nueva era de la IA?
Estas cuestiones son tan esenciales que incluso los expertos mundiales en IA discrepan sobre cómo responder de forma sostenible a estas preguntas complejas y fundamentales.
La cultura de una organización es la columna vertebral de la empresa: más que nunca, es la cultura corporativa la que determinará el éxito de una empresa en el futuro.
En tiempos de cambio y alta velocidad tecnológica, aportará la estabilidad necesaria a las empresas.