IoT y fabricación digital: todo es cuestión de red
Más de una de cada dos empresas de este país ya tiene una visión de IoT. El 40 por ciento de las empresas está trabajando en un plan de implantación de IoT. El 79 por ciento espera un aumento de la inversión en los próximos años.
Las cifras muestran que la resistencia en las empresas está disminuyendo. Esto hace aún más importante que los proyectos de IoT no se aborden a medias, sino que conduzcan a casos de uso maduros y nuevos modelos de negocio. Las dimensiones de la interconexión descritas aquí muestran lo que hay que tener en cuenta en el proceso.
Dimensión 1: Recogida de datos
La base del Internet de los objetos es -como su nombre indica- la conexión de objetos físicos con una red basada en datos. La interfaz de comunicación suele establecerse a través de sensores que recogen y transmiten información en grandes cantidades.
Aquí ya es importante fijar el rumbo para un uso productivo: ¿Puede la infraestructura informática hacer frente a la gran cantidad de datos? ¿Pueden filtrarse o comprimirse los datos desde el principio para que sólo la información importante llegue a las redes posteriores?
La cuestión de la forma en que el gemelo digital se mapea en el sistema también debe aclararse satisfactoriamente para que la aplicación IoT siga siendo escalable para despliegues mayores.
Dimensión 2: Panorama del sistema
El mercado de soluciones y componentes de soluciones IoT está en constante cambio, ya que con cada proyecto piloto se desarrollan nuevos enfoques especializados y mejores prácticas. Es importante encontrar un camino para su propia empresa que evite los silos y se integre a la perfección con los sistemas existentes.
Hablando del mundo SAP: SAP Leonardo IoT, SAP Leonardo IoT Application Enablement, SAP MII, SAP ME, SAP PCo y SAP Digital Manufacturing Cloud -la lista puede ampliarse individualmente para cada empresa- deben integrarse en la fabricación digital de tal forma que se garantice la continuidad entre la planta superior y la planta de producción.
Solo cuando la conexión en red se produzca no solo de lo físico a lo digital, sino también de lo digital a lo digital, los responsables de la toma de decisiones tendrán la oportunidad de aprovechar plenamente el potencial de la IO en las aplicaciones empresariales y evaluar nuevos modelos de negocio.
3ª dimensión: megatendencias informáticas
La consultora IDC predice que los servicios básicos de blockchain se utilizarán en el 20 por ciento de todos los despliegues de IoT en 2019. Especialmente cuando se trata de la protección contra la manipulación durante la transferencia de datos, IoT y blockchain pueden sobresalir juntos.
Esto crea casos de uso que hacen más seguro el transporte de mercancías sensibles, por ejemplo. Sin embargo, no solo blockchain, sino también otras megatendencias informáticas pueden combinarse con aplicaciones del Internet de las cosas para lograr un enfoque holístico:
Funciones de análisis del ámbito de los macrodatos, el aprendizaje automático y la comunicación de máquina a máquina del ámbito de la IA (inteligencia artificial) o el control de sistemas mediante la entrada de voz móvil.
Las empresas que planifican proyectos de IoT pueden aumentar el impulso de su impacto conectando en red las distintas iniciativas de transformación digital de su casa y buscando la integración de todas las actividades desde el principio.
No unidimensional, sino multidimensional es la máxima cuando se trata de planificar y aplicar una estrategia para el Internet de las Cosas. Para que las nuevas soluciones se conviertan en un motor de crecimiento y rentabilidad, las empresas necesitan previsión y una profunda conexión en red.