¿Está Alemania preparada para el IoT?
La conexión en red de productos, máquinas o instalaciones avanza a pasos agigantados. IDC predice que los actuales 14 900 millones de "cosas" conectadas en todo el mundo se duplicarán de aquí a 2020. Para obtener información sobre los planes de implantación, los retos y los factores de éxito de las empresas alemanas en el uso de las tecnologías del Internet de las Cosas, IDC realizó un estudio de mercado primario en octubre de 2016. A pesar de que el 72% de los encuestados califica el Internet de las Cosas como muy o extremadamente importante para su empresa, la mayoría de las organizaciones todavía se encuentran en la fase de evaluación y planificación de iniciativas de IoT. En este sentido, las grandes empresas están impulsando la adopción de IoT con más fuerza que las medianas. Los obstáculos para una implantación más rápida de IoT residen en los presupuestos ajustados (28 por ciento), la falta de conocimientos técnicos (24 por ciento) y la elevada complejidad de las soluciones IoT (27 por ciento). El hecho de que muchas empresas se encuentren aún en una fase inicial también se refleja en la financiación ad hoc: suele tratarse de presupuestos de proyectos (25 por ciento) o de presupuestos de los departamentos especializados (23 por ciento). Normalmente, las empresas pasan por cuatro etapas en la implantación de casos de uso de IoT: En el primer paso, los objetos, activos o productos se conectan en red. La información resultante proporciona la base para la segunda etapa, la supervisión de los objetos y procesos correspondientes. En la tercera etapa, las empresas utilizan la información disponible para optimizar procesos y procedimientos. Y por último, en el cuarto nivel, se realizan nuevas ofertas y servicios para los clientes a través de casos de uso de IoT. En todos los sectores, los casos de uso basados únicamente en la conexión en red de objetos siguen siendo los más frecuentes. Por lo tanto, muchas empresas se encuentran todavía en la primera fase, dominada por el enfoque interno frente al enfoque en el cliente. Esto demuestra que muchas empresas no han hecho más que empezar con la implantación. Sin embargo, las empresas no deberían quedarse estancadas en la primera o la segunda fase.
La Internet de los objetos no solo ofrece a las empresas la oportunidad de optimizar los procesos internos, sino también de realizar modelos de negocio completamente nuevos. Es, por tanto, un elemento clave de la transformación digital de las empresas. Sin embargo, los resultados del estudio dejan claro que las organizaciones siguen centrándose demasiado en la optimización de los procesos internos.
Potencial subestimado
A menudo no se reconoce el potencial de ofrecer valor añadido a los clientes, diferenciarse de la competencia o aprovechar nuevas fuentes de ingresos a través de productos y servicios conectados. IDC está convencida de que las empresas que centren pronto sus actividades de IoT en el valor para el cliente serán las que más se beneficien del aumento de la conectividad.
Aunque los casos de uso de IoT difieren según el sector, las empresas se enfrentan a retos similares. Los principales son la seguridad, la financiación y los conocimientos técnicos. Solo si los responsables de la toma de decisiones consiguen desarrollar respuestas a estos acuciantes retos, el Internet de las Cosas se convertirá en el motor de los proyectos de transformación digital de su empresa.