

La tendencia a la individualización de los productos aumenta la complejidad de la producción industrial. Esto ya no se puede gestionar con los métodos actuales. La solución es el uso de inteligencia artificial en la planificación de la producción.
Aquí es donde entra AIXBrain. Su software de autoaprendizaje se encarga de orquestar procesos de producción muy complejos. Para ello, se basa en el statu quo respectivo de los procesos de producción y también integra soluciones independientes relacionadas con los procesos en el proceso global.
Lo mismo cabe decir de las aplicaciones del mundo SAP. Jürgen Hermann, CEO de QSC, comenta la inversión:
"QSC ofrece soluciones industriales complejas. El software de IA amplía la cartera, combina soluciones independientes y acelera la producción."