Una llamada de atención para todos nosotros que debería haberse producido hace tiempo
El enorme portacontenedores "Ever Given" se quedó atascado en el Canal de Suez, bloqueando una de las rutas marítimas más importantes del mundo. Este enlace de 120 millas entre el Mar Rojo y el Mediterráneo es atravesado por una media de unos 50 buques al día y casi 19.000 al año.
Esto representa alrededor del doce por ciento del comercio mundial total. Los retrasos que han sufrido y seguirán sufriendo las cadenas de suministro mundiales como consecuencia de este incidente tendrán consecuencias de gran alcance.
Desde los puertos a los muelles, pasando por los centros de distribución, todos los procesos logísticos se están viendo sacudidos. La probabilidad de que se produzcan interrupciones en la cadena de suministro puede predecirse con inteligencia artificial. Aunque ninguna IA del mundo podría predecir este suceso concreto, la tecnología sigue siendo una parte esencial de la solución.
Puede tomar decisiones basadas en datos en cuestión de minutos y redirigir los flujos de mercancías para que las cadenas de suministro no se paralicen por completo. El proceso de reprogramación manual puede durar varios días en caso de una interrupción tan grave como este accidente.
Recopilar los datos necesarios por sí solo lleva mucho tiempo. Con la IA, este proceso puede automatizarse y se pueden encontrar rutas de aprovisionamiento alternativas sin necesidad de intervención humana. Por lo tanto, las empresas que confían en esta tecnología avanzada tienen una ventaja competitiva significativa debido a la velocidad de las decisiones basadas en datos.
Ayudan a garantizar que las fábricas no se queden paradas y que los productos sigan estando disponibles. Blue Yonder, que recientemente recibió un premio sin parangón de Gartner por su cartera Luminate, aboga por pensar en el futuro. Con una inversión en una solución moderna para la cadena de suministro, pueden evitarse los costes de expedición, que de otro modo serían mucho más elevados.