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A raíz de la pandemia del Covod 19, la demanda de externalización se enfrió bruscamente en Europa, Oriente Medio y África (EMEA) en el segundo trimestre de 2020, en particular para los servicios gestionados tradicionales, que cayeron un 21%. Así se recoge en el último Índice ISG EMEA, basado en las últimas cifras del sector de la externalización.
El índice ISG de EMEA hace un seguimiento de los acuerdos de externalización del sector privado con un valor contractual anual (VCA) de al menos 5 millones de euros. El último índice muestra que el mercado total de servicios gestionados y as-a-service del segundo trimestre disminuyó un 9% interanual hasta un total de 3.900 millones de euros. Es la primera vez desde 2018 que la región EMEA registra dos trimestres consecutivos de descenso.
Los Servicios Gestionados Clásicos lastraron los resultados del mercado global. El volumen de contratos se redujo un 21%, hasta 2.300 millones de euros. Dentro del segmento de servicios gestionados, la externalización de TI (ITO) se contrajo un 19%, hasta 1.900 millones de euros, mientras que la externalización de procesos empresariales (BPO) se desplomó un 31%, hasta 346,4 millones de euros.

Al mismo tiempo, en la región EMEA aumentó la demanda de servicios en la nube como base para el trabajo distribuido y la mejora de la seguridad de los datos. En el segundo trimestre, el volumen total de contratos as-a-service aumentó un 13%, hasta los 1.700 millones de euros. La infraestructura como servicio (IaaS) supuso un aumento del 23%, hasta los 1.200 millones de euros, mientras que el software como servicio descendió un 8%, hasta los 419 millones de euros.
EMEA tuvo un buen comienzo en 2020 antes de que la región se viera afectada por la pandemia en marzo. El impulso inicial de la región se refleja en sus resultados semestrales, que se situaron aproximadamente al mismo nivel que los dos años anteriores, a pesar del rápido descenso de la demanda debido a la pandemia.
El volumen de contratos para el mercado en su conjunto fue de 8.300 millones de euros en el primer semestre del año, un 2% menos que los niveles récord del primer semestre de 2019. En el primer semestre de 2020, los servicios as-a-service aumentaron un 9%, hasta los 3.500 millones de euros, mientras que los servicios gestionados disminuyeron un 9%, hasta los 4.800 millones de euros, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
"Covid-19 ha llevado a todas las empresas a reestructurar por completo su forma de trabajar. Esto ha impulsado la demanda de servicios de nube pública e Infraestructura como Servicio."afirma Barbara Florschütz, Directora General de Information Services Group (ISG) Alemania.
"La nube te permite tres cosas: ser resistente a lo que venga; ser más ágil para ampliar o restringir la demanda según las necesidades; y posicionarte para minimizar el riesgo económicamente mediante contratos flexibles."
Para el mercado global de contratación, ISG espera un crecimiento ligero y continuado en el tercer y cuarto trimestres de 2020. Para todo el año, la empresa prevé un descenso del 7,5% en el mercado de servicios gestionados.