A través de la educación se llega a la nube
No hace mucho que la contrita retractación de Christian Klein sobre las previsiones de crecimiento hizo que la cotización de SAP se desplomara en un buen tercio. Mientras tanto, analistas y accionistas respiran aliviados. Al fin y al cabo, los ingresos de la nube aumentaron un 20 por ciento. En 2021, se espera que los ingresos de la nube crezcan entre un 16 y un 19 por ciento y alcancen los 9.500 millones de euros.
SAP parece haber doblado la esquina y se dirige hacia un prometedor futuro en la nube. Sin embargo, la empresa sólo podrá mantener su altitud de crucero si hay suficientes personas que dominen la Plataforma Tecnológica Empresarial (BTP). A SAP no le queda más remedio que convertirse en una de las mayores empresas educativas del mundo.
Muchos periodistas y observadores del mercado ven indicios de que la estrategia de Christian Klein está dando sus frutos y de que S/4 Cloud podría convertirse en un éxito de ventas, aunque su competidor Salesforce parece tener las de ganar y una sólida manga en la carrera por el primer puesto en Cloud.
Tras la vuelta al éxito de ventas, los analistas miran con lupa y toman nota de si SAP sigue invirtiendo en la nube y, sobre todo, de cómo acompaña el avance de la digitalización en las empresas clientes y asociadas. Sin embargo, en estos círculos se habla mucho de ingresos, inversiones y características del software y demasiado poco de personas y competencias. SAP sólo ganará la carrera por el primer puesto en la nube si consigue llevar a las personas con ella. Eso sólo puede hacerse mediante la formación.
El Foro Económico Mundial ha calculado que con y debido a la aceleración de la transformación digital, unos mil millones de trabajadores tendrán que recibir una nueva cualificación o formación. Entre los analistas, existe la hipótesis de que alrededor del 70% del producto social mundial se ejecutará en algún momento en un equipo SAP, o pronto en la nube SAP. Esta cifra ilustra la cuota y la responsabilidad que la empresa global SAP tiene en el éxito de todos los esfuerzos de digitalización.
La corporación no puede evitar convertirse en un proveedor de educación a lo grande: ¿De qué le serviría a la empresa poder ofrecer la mejor experiencia en la nube debido a las numerosas adquisiciones corporativas si las personas de las empresas no pueden o no quieren dar el paso hacia el futuro porque carecen de las habilidades para hacerlo?
Max Wessel, Chief Learning Officer de SAP, parece reconocer la inmensa influencia que él y su profesión tienen en el futuro de SAP. Él y su equipo saben lo importante que es "conocer a las personas allí donde están". Se centra en "trayectos de aprendizaje" que hacen hincapié en la experiencia del usuario móvil y garantizan que cualquiera que lo desee pueda aprender todos los productos SAP desde su teléfono móvil, esté donde esté.
SAP hace mucho y se esfuerza mucho. La decisión de poner a disposición de los estudiantes programas de aprendizaje en línea gratuitos es un paso estratégicamente importante. Sin embargo, también tenemos que darnos cuenta de que muchos programas de aprendizaje de SAP de pago no satisfacen las exigencias de un aprendizaje en línea contemporáneo, interactivo y ameno tan bien como sugeriría su elevado precio. Incluso SAP tiene aún mucho que aprender y cada día aprende algo nuevo.
Todavía tienen que pasar muchas cosas para que la visión de la nube de SAP se haga realidad. Sobre todo, el aprendizaje debe adquirir por fin el estatus que merece: no un lujo agradable de tener, sino un requisito previo fundamental para la entrada de las personas, las empresas y las sociedades en una nueva vida en la nube. Para ello, los analistas deben medir el presente y el futuro de una empresa de software no sólo por las cifras de ventas y los parámetros tecnológicos, sino también por los índices de aprendizaje y la calidad de las ofertas educativas. Consultores, socios y clientes deben dar su opinión y exigir más y mejores oportunidades de aprendizaje: Sólo si las oportunidades de aprendizaje son diversas y pueden integrarse perfectamente en la vida cotidiana de los usuarios actuales y futuros, ¡la nube se convertirá en una realidad!