Minería de procesos para principiantes

La minería de procesos es relativamente fácil de explicar: en este método de gestión de procesos empresariales (BPM), un software reconoce y analiza los procesos de la empresa. A continuación, se analiza su eficacia y se optimizan. Para ello, la aplicación analiza los archivos de registro de los sistemas informáticos implicados en un proceso empresarial y los utiliza para crear un modelo de proceso.
Por tanto, la minería de procesos hace visible lo que ocurre realmente en los sistemas -y, por tanto, en la empresa- a diario. Una de las principales diferencias con respecto a la gestión de procesos empresariales es la forma en que se registran los procesos reales. En lugar de preguntar por ellos y documentarlos en talleres que requieren mucho tiempo, el software traza automáticamente el statu quo a partir de los datos de registro de todos los sistemas pertinentes.
La herramienta de minería de procesos obtiene directamente los pasos de trabajo individuales, los tiempos de trabajo y de espera, y los visualiza en un diagrama de flujo normalizado. De este modo, la minería de procesos descubre posibles puntos débiles, susceptibilidad a errores y cuellos de botella. También puede utilizarse para comprobar el cumplimiento de la normativa y los requisitos legales. Por tanto, contribuye al cumplimiento de la normativa.
En general, el proceso mejora la calidad de los flujos de trabajo, aumenta la productividad y, por tanto, reduce los costes del proceso. En el caso de los procesos que interactúan con los clientes, también se puede mejorar la experiencia del cliente. No son necesarios demasiados requisitos previos para utilizar la minería de procesos.
Sin embargo, un factor decisivo para el éxito reside en los datos. Esto empieza con el acceso a los datos de registro de todos los sistemas implicados en un proceso. Además, deben estar siempre normalizados y completos.